El olor a pan es algo que siempre nos evoca a un buen recuerdo, un buen croissant es una delicia que también podemos preparar en casa y nosotros en Fratello queremos darte esta receta de croissant que mmmm encantarán en casa más aún con nuestra esencia sabor a mantequilla.
Ingredientes
• 500 g de harina de trigo
• 10 g de levadura seca activa
• 50 g de azúcar
• 10 g de sal
• 250 ml de leche tibia
• 250 g de mantequilla fría
• 1 huevo batido para barnizar
• 1 cdta esencia sabor a mantequilla Fratello
Preparación
- En un tazón grande, mezcla la harina, la levadura, el azúcar y la sal. Agrega la leche tibia, la esencia sabor a mantequilla Fratello y mezcla hasta que se forme una masa.
- Amasa la masa en una superficie enharinada durante unos 5-7 minutos, o hasta que esté suave y elástica. Forma la masa en una bola y colócala en un tazón engrasado. Cubre el tazón con un paño limpio y deja que la masa repose y doble su tamaño en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora.
- Mientras la masa está reposando, coloca la mantequilla entre dos hojas de papel encerado y golpéala suavemente con un rodillo para formar un rectángulo de aproximadamente 20×15 cm. Refrigera la mantequilla hasta que esté firme pero aún maleable.
- Después de que la masa haya duplicado su tamaño, colócala en una superficie enharinada y estirarla en un rectángulo de aproximadamente 40 x 30 cm.
- Coloca la mantequilla en el centro de la masa estirada y dóblala sobre la mantequilla, sellando los bordes.
- Gira la masa de manera que el pliegue quede a tu derecha y estira nuevamente en un rectángulo. Dobla un tercio de la masa hacia el centro y luego dobla el otro tercio encima, como si fuera un tríptico.
- Envuelve la masa en plástico y refrigerar durante al menos 30 minutos.
- Después de refrigerar, retira la masa del refrigerador y repite el proceso de estirado y doblado dos veces más. Refrigera la masa entre cada pliegue.
- Después del último pliegue, envolver la masa en plástico y refrigerar durante al menos 1 hora o durante toda la noche.
- Después de que la masa haya descansado, extiendela en un rectángulo de aproximadamente 40 x 30 cm. Corta triángulos con un lado largo de aproximadamente 10 cm.
- Enrolla cada triángulo desde la parte más ancha hacia el vértice, formando la clásica forma de croissant.
- Coloca los croissants en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino, dejando suficiente espacio entre ellos. Cubre con un paño limpio y deja que los croissants fermenten durante unos 45-60 minutos, o hasta que dupliquen su tamaño.
- Precalienta el horno a 200°C (390°F). Barniza los croissants con huevo batido.
- Hornea los croissants en el horno precalentado durante unos 15-20 minutos, o hasta que estén dorados y crujientes.
- ¡Retira del horno y deja enfriar antes de disfrutar tus deliciosos croissants caseros!